viernes, 31 de agosto de 2012

Pelea de perra


No tengo tus pálpitos ni dígitos,
Ni quiero tus espantos ni gritos.
Me canse de esperar un colín,
Un bello pájaro pitufo peregrín.

Me enmanse en refugios traídos.
Llevados, otra vez, del espanto,
Cosidos con las puñaladas frías
de tu lengua de coral y acanto.

Soplaba el levante, como ahora.
Calentaba el sol, loco de amargor.
Y en la entrepierna, sutil y cálida,
De tu entrepierna de seda y tremor,

Podía el tiempo perderse sin mi,
Podían anidar aves y torpes gansos.
Difícil es alcanza a un gran manso,
Sin verbo, violada y con pedigrí.


sábado, 25 de agosto de 2012

A contracorriente

Y el Sol rubicundo calienta
En la tarde áspera de brisa,
Y no desaparecen las colillas,
Ni se va tu aliento de menta.

Discordias a la carta del ruiseñor,
Atrevidos moteros con prisa,
Una paloma que escapa a la risa,
Y un batín de precioso señor,

Sin castillo, sin amas y amado.
Preciados tesoros escondidos
De las luces de bohemia que riman.

Y una esquiva y furtiva mirada
Que se presenta azulada y con ruido,
Y unos insultos que me miman.

Y el mismo puesto de hada,
Y la misma vacante en el lado.

domingo, 12 de agosto de 2012

Más

Te regalé versos feos e insostenidos,
Y pistolas de las que disparan rosas,
Sonrisas cinceladas en antiguas fosas,
Verde piedra, verde rama y verde ruido.

Te regalé palabras de buen amigo,
Y fósiles de una lengua infinita y lejana,
Cosas sin importancia, y verdes ranas,
Que saltaron delicadas en tu ombligo.

Todo verde, nada rojo, todo necio,
Nada cierto, se catapultan a los cielos
Pensadas rutinas del azar lanzado.

Es obligado, es advenedizo, y precio
De cantar ensimismado y sin velos,
Todo a la mentira, todo a los hados.