martes, 20 de septiembre de 2011

Vino de futuro

Próximo a una imagen idealizada,
Me engañé una vez más con grandeza.
La inocencia es un principio,
Y el vino malo, un mal lector de rimas.
El joven te arrima, y te anima,
Pero lejos del precipicio.
Cómo pintar con esta pinta,
Cómo rimar rimas, y adrizar,´
Y cómo engañar con versos al pasado.
No hay excusas para los malos pulsos,
(Pulsos del corazón,
de los otros se poco.)
Y en esta pequeña campaña militar
Que es mi vida y mi razón,
Sigo soñando con sueños
Que no se corresponden con ninguna realidad.
Sigo visitando paraísos vedados,
Sigo entorpeciendo la vista con lo simple,
Lo valiente, lo certero, lo unívoco.
Que torpe lectura propiciada a lomos
De vino joven, de cariz sincero,
De sensación rápida.
De embriaguez cálida,
Y siempre sentida. A veces amarga.
Un buen vino de futuro,
Es mejor no beberlo rápido.

jueves, 15 de septiembre de 2011

Acre

Saqueadores de sueños de hojalata
Se dejan ver por las esquinas de ciudad,
Portan ojos rojos colmados de gravedad,
Y bailan danzantes, junto a las ratas.
En el interior de sombras se delatan,
Mirando lo que quisiste con verdad,
Alzados por encima de tu sinceridad,
Recogen tus frutos, y suyos, los atan,
A su futuro podrido, vil y codicioso.
Y tú penas, entre las pobres ruinas;
Y ellos bailan inyectados en sangre.
En tu sangre, en la mía, en la de otro.
Como virus se extiende hasta la mina
y a todos nos queda un regusto acre.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Nada, ¿qué haces?

Nada, qué haces?, sólo naderías.
En un rincón oscuro estabas sola,
Y arrinconada como una mosca por el sol.
Te saqué de paseo, dí contornos a tus regalos,
Y no te pedí que tuvieras prisa.
Incondicionalmente subí a tu barco,
Con abnegación te dí cada día,
Te preste minutos que no debía,
Comí en el vacío de tus platos,
Sorbí tu agua inexistente y sípida.
Y ahora, ahora, no pienso mirarte más,
No oleré más tus trastos de barco viejo
En la furiosa noche de alta mar.
Olvido los precipicios por ti,
Aguanto en las llanuras de aguas calmas,
Y te veo con gusto amargo en la boca.
Y sé que nada no es más que nada,
Enrome y sutil acantilado,
Te veré en fotos si Dios lo quiere

viernes, 9 de septiembre de 2011

Pías????

Ya basta de impías,
De latidos podridos,
De los ladrones y saqueadores
Que éstas se regalan.
Se terminaron las decisiones a medio tomar,
El calor escueto del sexo de alma pobre.
No me perdonaré mas la virtud,
Ni negaré, más allá, de la puerca moral,
Que unos valen y otros no,
Y que saben demostrarlo con perfección.
No perderé más el tiempo
Con cariños imperfectos de gato caprichoso.
Toca volver a lo digno, quizás dichoso.
Porque en la oscuridad se agradecen las sombras
Pero durante el día tu debes radiar por dos.
Y yo quisiera iluminar los planetas
con los colores de tu alma,
Un alma antigua, y pura sencillez,
Colores dignos de una dama
para el infinito y estrellado cielo.

Amor se escribe con cuatro letras

Callado como un poeta autista,
Comprimido por la falta de sueños,
Esclavo de miradas perturbadoras,
Ociosa luz vista en tus pupilas.
Algoritmo fundamental de la soledad.
Amigo de la muerte y renacimiento.
Pidiendo silencio para el corazón,
Rodeado de almas sin su dueño.
Caído a un mundo de particularidades,
Comido por los perros de la indefensión,
Cercado por las bestias del ego,
Magnífico paladín de la palabra única.
Amor se escribe con cuatro letras,
Místicas de luz, calor y sombras.
De ligeros recuerdos de dormitorio.
De palabras cómplices en una mañana
Con la cortesía de no dormir la noche.

Con tu sudor sigo pidiendo silencio,
Callado como un poeta autista,
Comido por la suprema sensación
Del momento encontrado en penurias.
Agasajado sólo por tu plumas,
Que admiro en la lejana y triste
Conjunción de cariz melancólico.

No puedo acercarme a una estrella,
Sin quemarme, y quedar harapiento,
Sin pudrirme en el total silencio
De admirar tu ser y tus cosas.

Soy un quijote sin sueños,
De visiones tan tangibles como dios,
De misterios tan profundos como el lenguaje.
De palabras que cierran el circulo.
Y en mi circulo hay un segmento,
Y en mi segmento una medida,
Una medida, áurea y sublime,
Que pintan tus labios en mi contorno.
Y no tengo más que pedir silencio,
Y respetarlo.
Para cuando sea tiempo de hablar contigo,
Y de gozar tus besos.