Soy tan frío como el mármol,
Soy tan esquivo como la verdad,
Soy tan vivo como la veleidad
Y tan sempiterno como un árbol.
Soy tan inquietante como Pábulo,
Y, solo, tan rico, como Ali ba bá,
Soy tan tierno como pudiera Galván,
Y a nada le hago ni pongo asco.
Y resulta que me veo que merezco
Los astros de una tienda de chinos,
Los versos de los que carezco.
¿Será que no te veo, y perezco,
De viejo vomito sin rima ni tino?().
No, sólo parece que me aborrezco
Hola. Y uno es como que anda a los tumbos pero anda jaja. A veces bien, otrs no tanto. Como la marea que sube y baja, como el hielo y el fuego, como el mediodia o la medianoche... pero vamos.
ResponderEliminarLo importante es seguir, no parar la marcha del todo. Dejar nuestra propia huella, alumbrar un nuevo camino, ponerle otro color al cuadro, ponerles nuevas palabras a los cuadrenos. A veces mas rapido y otras maslento, com mas o menos animo.
Pero lo ideal es seguir! Un abrazo