Arena, tacto, sonrisas de trapecista,
El sol bien alto en el largo horizonte,
Pregona que no es hora de discursos,
Palabras cortadas en la vera del cable.
Amistad furtiva y desencantos pasados,
Redes de mimbre para el dulce abismo,
Pájaros de pega rondando tu vuelo.
De un trapecio a otro con salto y pirueta,
Perdida la cabeza en el orden muscular,
Te agarras fuerte, y muy profesional,
Pero tu vuelo es vano¿ donde agarras?
Son garras tus manos de papel y silicato,
Hay un cristal profundo entre tus ojos,
Una luz que no apaga nunca su fulgor.
Ni la muerte ni el olvido pueden con ella.
Espera que tu de red mimbre seco y duro
Rompa en tu cálida y desestimada caída.
En el fondo junto al polvo seco
Bajo la carpa azul descolorido,
Veo a los payasos bailando y cayendo,
Y a ti, con la cabeza en el polvo,
Riendo a lo loco la eterna función.
Augusto dijo en su lecho de muerte:
“ Mi papel desempeñe como debía”.
El sólo era un emperador de Roma,
Vosotros sois libres, pero si lo sois,
Seréis terroristas, jajajajajajaja
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